La joyería es un imprescindible de Meghan y siempre la lleva en pequeñas pero valiosas versiones ya sea en perlas o diamantes.
Una de sus piezas favoritas que nunca le fallan y se vuelven versátiles protagonistas. Apuesta por estilos con solapa y largos para llevarlos con jeans o cortos a la cintura cuando lleva un traje sastre.
Los colores de Markle destacan el borgoña, el negro y el blanco. Pero también ha apostado por los tonos pastel y un azul cielo para sus salidas con Harry al aire libre.
A diferencia de los ostentosos tocados de otras royals, Meghan cree en el less is more. Su favorito es uno tipo boina que siempre combina con su outfit.
Su escote favorito es el tipo barco que enmarca sus hombros y estiliza su cuello y figura en general para lucir más alta.